Con bailes y coreografías de los años 50, la cadena norteamericana, que lleva cinco años en el país, ha creado una innovadora fórmula que nos traslada, en un abrir y cerrar de ojos, al mundo de Elvis, Marilyn Monroe o Chuck Berry.

¿Qué tienen en común, Mickel J. Fox entrando al Bar de Lou, en Volver al Futuro, o John Travolta Bailando junto a Uma Thurman "You never Can Tell", de Chuck Berry? La respuesta es simple, hamburguesas, shakes y mucho swin. Con casi 30 años de vida y 5 en nuestro país, Johnny Rockets trae toda la magia de los años 50, dando una experiencia única, donde la comida estilo all-american, se mezcla con performances, bailes y, sobre todo, rock and roll.

Media decena de "servers" bailando al ritmo de kool & The Gang, mientras sirven gaseosas y hamburguesas, al mismo tiempo que otro grupo saludan a coro y con un fuerte y alegre "Hola" a un nuevo cliente que observa sorprendido la escena, todo esto coronado con verdaderos geek del servicio, sacados de Grease Brillantina, es sólo parte de lo que puedes experimentar en esta atípica cadena de comida.

"Celebration”, “Johnny B Good”, “Love Shack”, “Respect”, “Rockin Robin”, “That’s the way I liked” o “Footloose”, son parte de las diferentes coreografías que espontáneamente los trabajadores de Johny Rockets bailan, entre wurlitzers e íconos de los 50, mientras sirven shakes, hamburguesas, aros de cebolla o papas fritas. La idea es generar una experiencia única y transportar a los clientes, no sólo a otro tiempo, sino a una real experiencia gastronómica.

Entrar a Jonny Rockets es entrar en un verdero Delorean y viajar más de 60 años en el tiempo. Sin embargo, la propuesta no sólo permite que los clientes se sumerjan en una verdadero transito al pasado, sino que este tipo de dinámicas es una innovadora forma de hacer de la comida una real experiencia.

Cada 30 minutos diversos grupos se van turnando en diferentes rutinas, que permiten mezclar la música, el rock y entretenidas dinámicas que nos buscan más que demostrar que la buena atención es un importante condimento a la hora de escoger un restaurant.

Route 66, el shake Oreo Cookies&Cream, el starter Onion Rings y el sándwich Philly Cheese Steak, han hecho de Johnny Rockets el verdadero líder de la All American Food. Pero no sólo los shakes y sus enormes hamburguesas han construido esta fama, sino su compromiso por tener una carta acorde a todos los gustos y exigencias de los clientes. Es por esto que otra de las novedades de esta cadena es la línea light de sus productos; hamburguesas vegetarianas y, su último plato, la Rockin Salad, son sólo algunos de las alternativas que vienen a demostrar que esta cadena de comida, no es sólo un restaurant de lo más clásico del menú norteamericano, sino que también una diversa y entretenida forma de comer bien.